Hablar en público, de manera airosa, sin dificultades
Cualquiera que tenga que hablar en público cierta activación de nerviosismo puede llegar a sentir cuando tiene que enfrentarse a situaciones como dar una charla ante un público, tener que hablar en una reunión, realizar una entrevista de trabajo u otras situaciones similares. Dicha activación puede ser normal para poder afrontar estas situaciones. Hablar en público, de manera airosa, sin dificultades, es una competencia que normalmente suele mejorarse con la práctica. Nadie nace con este don, y puede ser normal que puedas sentir esta sensación.
Podríamos decir que existen dos tipos de oradores, los que estas experiencias pueden vivirlas incluso como retos agradables, pudiendo llegar a gustarles la tarea de hablar en público y ocupar así lugares “de centro”; y en cambio, existen los que viven esta experiencia como una auténtica situación de ansiedad patológica, llegando a su extremo, convirtiéndose incluso en una fobia al ocupar ese lugar “de centro de atención”; estos últimos pueden llegar a vivir esta experiencia como una especie de tortura.
El miedo a hablar en público, para los que les resulta desagradable, es una experiencia vivida con cierto, estrés, ansiedad, vergüenza y/ o angustia. Cuando alguien tiene que hablar ante un público sobre algo y siente estas sensaciones, podemos hablar en términos más técnicos de la Glosofobia. Quienes padecen esta respuesta desproporcionada, reconocen que el malestar, puede empezar antes, durante e incluso después de la exposición a realizar. Nos ponemos en modo supervivencia, ante algo que nos supera, y es esta respuesta desmesurada la que invade, activa y nos prepara como si tuviésemos que huir ante el peligro. Todo nuestro ser se activa, ante esta experiencia vivida como una amenaza, y el cuerpo y la psique reaccionan activando los circuitos fisiólogicos, psicológicos y comportamentales, haciéndonos pasar este mal rato ante nuestro temido público.
Este miedo se puede presentar de diversas maneras: A modo de pensamientos obsesivos, inquietud, nerviosismo, falta de aire, sequedad de boca, enrojecimiento de la piel, malestar grastrointestinal, otros posibles malestares corporales, insomnio, taquicardia, pérdida del hilo del argumento, voz inestable e incluso mareo; éstos son algunos de los síntomas de quienes lo padecen.
Cuando alguien se encuentra en esta situación tiene dos opciones: o lo afronta y atraviesa, o empieza a tener comportamientos donde lo que hace es evitar cualquier situación que tenga que ver con hablar en público, convirtiéndose en su auténtico fantasma, que llega a hacerse algo más grande por el mero hecho de no afrontarlo, y el que lo padece se hace pequeño ante “su público”, cuando tiene que lidiar con este tipo de experiencia.
Detrás de este Miedo, o Fobia (si ha llegado a su máximo desarrollo) se pueden encontrar, la falta de práctica, el perfeccionismo y sus exigencias, no haber podido desarrollar habilidades comunicativas por distintas causas en la infancia, haber vivido experiencias negativas relacionadas con la exposición en público, la timidez, y una baja autoestima. Este miedo a hablar en público da su cara, con el miedo a ser evaluado negativamente por los demás, a quedarse en blanco, a no saber responder alguna cuestión, miedo a no contar de manera interesante lo que tenemos que decir, a no ser escuchados, miedo a vivir vergüenza frente a un posible ataque, fracaso y/o humillación.
¿Te sientes identificado con algunas de estas cuestiones? Podemos ayudarte. Es importante atender tu miedo, y aprender a manejarlo. Podemos acompañarte en el desarrollo de estrategias para su superación. Aprenderás a regular las situaciones que te generen ansiedad, conociendo las situaciones vividas relacionadas con tu miedo. A través de la psicoterapia, de técnicas aplicadas en EMDR, técnicas gestálticas, Mindfullnes, técnicas en psicodrama, podrás abordar nuevas respuestas como alternativas diferentes, convirtiendo ese miedo en un auténtico ejemplo de tu superación, reconduciendo así tu Miedo a hablar en Público.